Galería
Implementamos un dispositivo pedagógico inclusivo y diverso que utiliza la cultura urbana como su motor principal, reconociendo el Hip Hop y las músicas urbanas no solo como expresiones artísticas, sino como el ejemplo central y lenguaje más potente de la juventud. El corazón de este proceso son los talleres teórico-prácticos anclados en los cuatro elementos del Hip Hop y el manejo de los elementos necesarios para la creación y formación de un artista. Este enfoque aprovecha la autenticidad y el espíritu crítico de la cultura urbana para detonar expresiones artísticas que reflejan la realidad juvenil. Al usar el arte que ya es referente de los jóvenes, se asegura una mayor motivación e identificación con el proceso formativo. El objetivo final del dispositivo trasciende lo artístico para facilitar procesos de paz y reconciliación territorial. Esto se logra al usar la narrativa inherente al Rap y el diálogo de los otros elementos como plataformas seguras donde los jóvenes pueden:
Canalizar el conflicto: Transformar las tensiones y violencias cotidianas en letras, movimientos y arte visual. Construir tejido social: Fomentar la colaboración, el respeto por las diferencias y el liderazgo positivo a través de los crews (grupos de trabajo).
Nuestro proceso busca dotar a las comunidades y a los jóvenes de las herramientas necesarias para su formación integral, asegurando su sostenibilidad y permanencia en el territorio:
Fomentando el liderazgo y la capacidad de autogestión de proyectos.
Formación Artística: Elevando la calidad técnica de sus expresiones urbanas.
Formación Social y Cultural: Consolidando su rol como gestores culturales activos y promotores de convivencia en sus propios barrios.
De esta manera, la cultura urbana se convierte en un capital social que empodera a los jóvenes para ser los protagonistas de la transformación de sus territorios.
Nos enfocamos en el rescate y acondicionamiento de los escenarios deportivos y culturales de la comunidad, que se encuentran en un estado de casi total abandono y no son utilizados para fines deportivos ni culturales.
La iniciativa central de la actividad consiste en grafitear estos espacios de barrio. Esta acción no solo dignifica y revitaliza las áreas de esparcimiento y recreación al aire libre, sino que también representa fuertemente la identidad de la comunidad, reforzando su sentido de pertenencia e identificación con estos lugares. Al rescatar y acondicionar estos escenarios, la fundación cumple una doble finalidad: Dignificar los Espacios: Devolver a la comunidad sus áreas vitales para el deporte y la recreación. y Motivar a la Juventud: Dar un ejemplo a los niños y jóvenes sobre la importancia de procurar interesarse por el deporte y las artes, promoviendo un uso positivo y creativo de sus entornos.
A través de eventos culturales y de arte urbano (como batallas de Breaking, sesiones de Freestayle/Rap y exposiciones de Graffiti , cypher de bailes de diferentes géneros muscales, y presentaciones de grupos artísticos diversos), a menudo realizados en espacios públicos o comunitarios nos trazamos los objetivos con finalidad dual de:
Para los Jóvenes: Ofrecer una herramienta de expresión y un camino alternativo a la violencia y el ocio improductivo, canalizando la energía juvenil a través de las cuatro manifestaciones del Hip Hop y los diferentes artes urbanos existentes en la ciudad.
Para la Comunidad (Jóvenes y Adultos): Servir como un vehículo de transformación social y resistencia. Mediante el arte urbano, el colectivo impulsa la consciencia social, la protesta constructiva y el empoderamiento, utilizando su arte para reflejar y debatir las problemáticas sociales de la ciudad, arraigadas en su identidad afrocaribeña y multicultural inclusiva generando constantemente una cultura de paz y sana convivencia